Es el antioxidante más potente de la naturaleza que nos ayuda a combatir los signos de la edad, mejorar el rendimiento físico, la visión, cerebro y la salud ósea.
Aumenta las células (linfocitos B y T) del sistema inmunitario y ofrece una protección importante contra los radicales libres
Investigadores ven en este antioxidante un futuro como parte de los tratamientos para enfermedades de las articulaciones.
Reduce el dolor articular y muscular después del ejercicio, junto con un aumento de la resistencia y una rápida la recuperación.
La mayoría de las enfermedades del cerebro son como resultado de la oxidación y la inflamación causada por los radicales libres
La astaxantina es de 11 a 50 veces más potente que el beta caroteno, y el beta caroteno puede ayudar a prevenir el cáncer.
Cruza la barrera sangre-cerebro y la barrera retina, lo que da protección antioxidante y anti-inflamatoria a los ojos.
La astaxantina es, con mucho, el antioxidante carotenoide más poderoso en términos de absorción de radicales libres: la astaxantina es 65 veces más potente que la vitamina C, 54 veces más que el betacaroteno y 14 veces más que la vitamina E.
La astaxantina cruza la barrera hematoencefálica y la barrera hemorretiniana (el betacaroteno y licopeno no), de esta manera aporta protección antioxidante y antiinflamatoria a los ojos, cerebro y al sistema nervioso central, reduce el riesgo de cataratas, degeneración macular, ceguera, demencia y enfermedad de Alzheimer.
Mecanismos de acción de la astaxantina
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